Editorial de El Nuevo Día, 18 de abril de 2011
Por Félix Jiménez
Casa Pueblo y el Colegio de Abogados han hecho más por Puerto Rico que Luis Fortuño. La primera siempre se ha acordado de conectar con la tierra, nunca ha vivido en las nubes. El Colegio nunca ha tenido antecedentes de favoritismos millonarios a amigos que se califican por el mero hecho de haber estudiado en colegios de élite. La administración fustiga a estas instituciones porque son muy laicas, muy libres y muy luminosas: tres cosas a las que Luis nunca ha aspirado en su existencia placentera, en su realidad paralela a la del país.
Imagen:logicprohelp.com
Su realidad es un "reality show", mejor dicho, un "brutality show" en el que las preguntas que esquiva día tras día prueban la tesis de Rubén Blades: cuando te cambian las preguntas, sólo tienes las respuestas aprendidas. Se las aprende y las ofrece y nunca satisface la cusiosidad de su interlocutor. No es un problema auditivo del gobernador, que se sepa. Es que la incapacidad de improvisación puede ser la ruina de cualquier político.
En su larga y blandamente histriónica alocución de la semana pasada se pusieron en evidencia nuevamente las debilidades retóricas del posible candidato que todavía tantea si se lanza o no al ruedo en 2012, cruzando dedos y tragando seco. El "macho man gesture"-que en nada le va-de sacar bolígrafo y estampar firma para continuar con su ficción retroactiva de la "crisis energética" reveló más testes que testa, pero el hombre tiene que arar finísimo con los bueyes políticos que le quedan.
Mientras, en Washington, en sólo cinco minutos y por tercera ocasión, el representante Luis Gutiérrez destruyó los supuestos fantásticos de la administración fortuñista frente a la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Eso es lo que le molesta a la administración: la facilidad con la que se puede desmontar -sin necesidad de $100 millones en publicidad-las "des-verdades" que transitan por la vía.
De cierta forma, el Luis de Chicago, Gutiérrez, está haciendo más por el bienestar filosófico y dialógico de la Isla que el Luis de Guaynabo. Él sabe que la decretada crisis energética es un corto circuito democrático. Esa es la crisis real, esa.
El autor es escritor y profesor universitario.
Les Esperamos en la Gran Concentración del Pueblo Puertorriqueño Unido en Contra del Gasoducto, el domingo 1ro de mayo de 2011 a las 11:00am en Adjuntas.
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